La salud ocular de los españoles obtiene un aprobado raspado, aunque en la franja de edad de los 41 a los 65 años suspende. Miopía y astigmatismo, entre los problemas de visión más prevalentes. Hoy es el Día Mundial de la Visión.

El uso de la visión está presente en todas las actividades que llevamos a cabo diariamente, donde además, también influye el tipo de vida que seguimos, por lo que el cuidado de la salud ocular se convierte en algo crucial.

Con motivo del Día Mundial de la Visión, el grupo Miranza ha realizado el “II Barómetro de Bienestar Ocular”, para conocer la percepción de salud ocular y la calidad visual que tienen sobre sí mismos los ciudadanos.

El estudio, basado en una encuesta de mil personas, muestra que el índice de bienestar ocular de los españoles es de 5.24 sobre 10, por lo que obtenemos un aprobado justo.

Además, en el caso de la franja de edad de los 41 a los 65 años, incluso suspendemos, con un 4.93.

Por otro parte, los resultados obtenidos del barómetro, muestran que la mayor parte de la población considera tener una salud ocular razonable, puesto que el 74% opina que esta es “normal”, “buena” o “excelente”.

La vista es una cuestión que preocupa bastante a los españoles, en concreto, en la franja de los 41 a los 65 (84%), siendo los menores de 40 el grupo más despreocupado (69%).

El doctor Jaime Aramberri y director médico de Miranza Ókular (Vitoria) advierte de la necesidad de de concienciar a la población para que revise su visión y prevenga problemas oculares.

En este caso, el informe revela que más de la mitad de los ciudadanos acude a revisiones cada 2-3 años o con menor frecuencia.

María Gessa, doctora y directora médica de Miranza Virgen de Luján (Sevilla), aclara: “es importante no resignarse a no ver bien y confiar en los tratamientos médicos y, en paralelo, asumir una parte importante de prevención, a través del mantenimiento de unos hábitos saludables y revisiones oftalmológicas anuales o cada dos años”.

El estudio señala que más de la mitad de los encuestados que cuentan con un diagnóstico no han sido tratados; a excepción de los pacientes con glaucoma (el 59% sí está siendo tratado), a los que siguen los que tienen miopía e hipermetropía (45%), y astigmatismo (41%).

Y solo alrededor de un 33% se ha sometido a tratamiento para solucionar su problema ocular.

Por otro lado, los encuestados tampoco son conscientes de la importancia que tiene el seguimiento de unos hábitos saludables en la calidad de la vista.

Solamente el 40% piensa que existe una relación entre el estado de su salud ocular y los distintos hábitos diarios, como dormir poco, el clima, fumar o beber, seguir una dieta poco equilibrada, llevar una vida sedentaria, o experimentar estrés.

“Nuestros ojos están diseñados para una vida paleolítica: vida en exterior, visión lejana y ejercicio intenso. La realidad actual es bien distinta y buena parte de la población lleva una vida sedentaria con un excesivo uso de pantallas”, señala el oftalmólogo.

La calidad visual está presente en el desarrollo de las actividades que protagonizamos.

Así, el 79% de las personas que declaran llevar una vida activa, manifiesta gozar de una salud ocular razonable, frente al 71% de los que son sedentarios o menos activos de lo que les gustaría.

En los casos en los que está presente el sedentarismo o una vida poco activa, el tipo de vista que más se emplea es a corta distancia (leer el móvil, utilizar el ordenador…).

Aunque de manera general no se percibe que la vista afecta al desarrollo de actividades, el 16% de los encuestados está de acuerdo en que su vista afecta a la capacidad de hacer deporte, mientras que un 23% considera que su vista le impide tener el control de lo que hace.

En el caso de trabajar y conducir, la calidad visual afecta en mayor medida. A la hora de conducir, las mayores dificultades surgen por la noche y cuando el clima no es bueno.

El estudio recoge que al menos 1 de cada 3 españoles tiene síntomas de problemas visuales, entre ellos:

La presencia de los síntomas se manifiesta generalmente cuando se hace uso de algún dispositivo (móvil, ordenador, tableta), en ambientes secos y ventosos, o cuando se utiliza el aire acondicionado.

Dentro de los diferentes problemas oculares, la presbicia (35%) y los defectos refractivos, como la miopía (33,8%) y el astigmatismo (31,4%), son los que se diagnostican con mayor prevalencia.

Así, el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas (CNOO) alerta de que en los últimos años, el astigmatismo ha aumentado un 11% y la miopía un 9%.

Lo que supone que el 72% de los encuestados cuente con el uso de gafas, ya sea de manera asidua u ocasionalmente, y el 16% con el uso de lentillas. Además, el 35% expresa sentir molestia por el hecho de tener que utilizar estos recursos de corrección óptica.

El CNOO expresa la importancia que supone acudir a los establecimientos sanitarios de óptica existentes con el fin de poder detectar a tiempo cualquier anomalía visual, ya que tres de cada diez españoles no acuden a revisiones periódicas.

Los expertos de Miranza recomiendan una serie de consejos que contribuyen a cuidar nuestra visión y a aumentar el índice de bienestar ocular:

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